San Salvador de Orta el último Templario

Próximo a cumplirse los quinientos años de la vida de San Salvador de Orta, ya es hora de hacerle justicia e intentar mostrar su verdadera biografía. Es muy triste encontrar solo los relatos de su obra contados desde un catolicismo fanático, que nos muestran a un santo milagrero, que resucita los muertos, levita, da el habla a mudos,... Un personaje muy lejos de esta realidad, pues todos estos milagros son solo leyendas y mitos.

La biografía que actualmente encontramos de él, escrita por el clero zaragozano, es un cuento para gente muy retrasada. De estas biografías solo podemos dar credito a cuatro pasajes de la misma, pues todo lo demás son historietas que muy bien se podrían insertar en el Quijote de Cervantes. Estos pasajes serían la existencia de Nuestra Señora de Orta, los problemas con la Santa Inquisición, su visita al emperador Felipe II y su estancia en Gandia en casa de Francisco Borja.

Para comprender lo que en realidad paso en aquellos años de mediados del siglo XVI, tendremos que estudiar la historia de Orta, una historia que se ha repetido siempre de la misma forma. Por su situación geográfica Orta es un enclave muy importante para dominar la entrada al interior de la Península Ibérica por el rio Ebro, pero en tiempo de paz esta importancia no tiene valor y la poblacion se ve relegada al olvido. Este olvido hizo que creencias muy antiguas pudieran continuar existiendo en esta zona, los cristianos conquistaron estas tierras a los moros, las dieron luego a los templarios y se olvidaron del lugar. Los templarios construyeron su convento, al ser abolida la Orden Templaria, me imagino que en Orta no hubo destrucción de ningún libro, documento, los Sanjuanistas debieron seguir con los mismos santos que tenían los Templarios.

Con la llegada de Felipe II al trono, la inquisición vuelve a activarse, principalmente contra luteranos y moriscos. En Orta se encuentran aun creencias no ortodoxas para aquella iglesia que domina todos los rincones del poder del imperio. Los que escribieron las primeras biografías de San Salvador, dejaron muchos datos, que hoy en día son muy incomodos para la iglesia católica. Unas biografías que han permanecido ocultas, hasta la llegada de internet y googlelibros, al igual que con el hallazgo de la biblioteca de Nag Hammadi, nos ha hecho tener otra visión de de Jesús de Nazared, internet nos ha dado un poco de luz sobre la vida del Santo de Orta.

Orta no se ha librado de participar en ninguna guerra despues del siglo XVI, esto ha llevado a la destrucción de toda la documentación, además de algun incendio del Convento de Orta. Solo nos quedan algunos apuntes de la época de San Salvador de Orta en otros archivos, pero sorprendentemente no nos hablan de San Salvador. El primero serían las visitas a la población que hizo el obispado de Tortosa en los años 1555 y1561.

Texto con las visitas pastorales del obispado de Tortosa

La otra sería una mención que se hace del Convento de Orta por el rector de Prat de Comte, Gregorio Maestre, en la Guerra dels Segadors, en donde la tradición dice que desapareció un relicario con una costilla de San Salvador.

 "...los sacrarios, custodias, plata y hornamentos de las sacristías de Corbera, de Villalba, de Batea, de Orta, de Bot, del convento de frayles de Orta (...) en Gandesa no se tocó el sacrario ni sacristia, porque el clero con dinero redimió esta desdicha...."
"heréticos gavatxs, lluterans enemichs de la fe",

Los únicos libros que nos hablan de San Salvador en los siglos XVI y XVII, estan escritos por inquisidores como Fray Pacifico Guiso y Pirell. Por tanto son biografías sin ningún valor, esto no me lo invento yo, esto lo dijo la iglesia católica en Roma, que no acepto ningún milagro relatado en estos libros y su canonización tubo que esperar cuatrocientos años despues de su nacimiento y en plena Guera Civil Española. Entonces fue declarado santo con dos milagros reconocidos, pero que ocurrieron en el siglo XX.

Su estancia en Gandia en casa de Francisco de Borja, duque de Gandia y Virrey de Cataluña, no deja de ser uno de los mayores misterios en la vida de San Salvador de Orta. Francisco de Borja (o de Borgia en la traducción italiana), fue hombre de gran poder (se dice que era mucho más poderoso que "su primo" el Rey de España, Carlos V) y era nieto de Papas. Sus abuelos fueron el rey Fernando de Aragón y Roderic de Borja, quien ha pasado a la historia como el intrigante, libertino y corrupto papa Alejandro VI, el que fuera el iniciador de la leyenda negra de los Borgia, una de las familias más controvertidas de la historia.



Francisco de Borja fue quien fundó las bases dela actual Compañía de Jesús y tan importante resultó para la Compañía que ha sido llamado "el segundo fundador". El fundó el primer colegio de Gandía, el punto histórico en que se inciaba el largo tránsito al Poder de la Compañía, fue el primer colegio que habrió sus puertas a alumnos seglares. 



Se habla en algunos foros de la gran influencia de los templarios en la formación de la masonería de escocia y en Cataluña en la fundación de la compañia de Jesús. El fundador de la compañía fue San Ignacio de Loyola de origen Vasco, pero su iniciación la realizó en Cataluña, en concreto en su estancia en una cueva de Manresa, no muy lejos de la iglesia de Santa Maria de Orta, en la biografía de San Salvador esta llena de milagros realizados a Vascos y Navarros. 

En uno de estos foros he recogido este parrafo : " Pero si estamos hablando de él aquí, es porque recogió el "encargo" que la Orden del Temple había recibido de Ishtar-Inanna. El recogió el testigo del "Plan" de Isthar-Mitra de manos de su hermano Galcerán, el descendiente de los Pinós, fundadores de la Orden del Temple. Recordemos que todos los jesuitas han sido siempre grandes devotos de la Virgen." 

Para confirmar las raices templarias de San Salvador de Orta y la conexión entre Templarios y Jesuitas tenemos que ver este documental titulado Templarios en America.









En la parte central mejicana tenemos la hacienda llamada San Salvador de Orta y otra Santa Barbara en el pueblo de El Rodeo del estado de Guerrero, y la iglesia de San Salvador de Orta en Matahuala, constrida en 1648, pero posiblemente se construyo sobre el mismo lugar en donde se alzaba la primitiva Capilla de la hacienda.